viernes, 20 de agosto de 2010
Poemas
domingo, 15 de agosto de 2010
La Mamacha Carmen de Paucartambo
Murió Armando Robles Godoy
"Todo el cine nacional está de duelo. El reconocido y laureado cineasta Armando Robles Godoy falleció hoy a las 11:30 a.m. en el Hospital Edgardo Rebagliati.
"El jueves pasado, la hija del cineasta Marcela Robles había pedido al público en general que apoyen a su padre con donaciones de sangre, con el fin de superar una recaída que había sufrido el cineasta".
Gran pena porque se nos va uno de los intelectuales más provocadores del medio, un iconoclasta en todo el sentido de la palabra. Como muestra, la sinopsis de su película Espejismo. Me llamó mucho la atención la pregunta del niño al maestro: ¿por qué no nos dijo que Caín mató con justicia a Abel?
domingo, 1 de agosto de 2010
Entrevista a Carlos Iván Degegori
“Este gobierno optó por ser el guachimán de la gran empresa”
Antropólogo, docente sanmarquino, investigador del IEP y ex comisionado de la CVR, Carlos Iván Degregori sigue con atención la realidad política, social y cultural del país. Aquí opina sobre el mensaje presidencial y otros temas urgentes.
Por Federico de Cárdenas

viernes, 16 de julio de 2010
Calle 13, al ataque nuevamente
sábado, 3 de julio de 2010
Primer sueño

- El Cusco fue centro de una importante cultura de la antigüedad y, de alguna manera, marcó un hito central en un desarrollo independiente de las denominadas "grandes culturas". Fue centro de esa cultura y de una cosmovisión de la que no hemos conocido mucho y, más bien, vamos perdiendo paulatinamente.
- Otro hito importante fue el de la revolución tupacamarista del siglo XVIII y sus repercusiones en el mundo andino, aunque también las consecuencias de la represión realista como consecuencia de la misma generó grandes pérdidas respecto a los pueblos andinos.
- Durante la primera parte del siglo XX, el Cusco y los cusqueños lograron volver la mirada sobre ellos mismo, sin perder de vista el acontecer mundial, intentando recuperar la esencia de la cusqueñidad y las posibilidades de un desarrollo regional.
- Desde los últimos 25 años del siglo XXI, el turismo y la actividad económica en torno al turismo, se han convertido en la columna vertebral de la ciudad, aunque paradójicamente esto ha generado una banalización de la realidad de la ciudad, en la que no existen actividades culturales, más allá de alguna excepciones y los permanentes espectáculos folklóricos.
- El kechua se viene perdiendo y cada vez son menos jóvenes urbanos los que hablan o, por lo menos, entienden este idioma. La Academia de la Lengua Quechua no tiene una dinámica importante que aporte no solo en el mantenimiento de esta lengua, sino respecto de su desarrollo para estar acorde con este tiempo. Sueño con que se desarrolle una Academia Plural en la que los diferentes dialectos del kechua tengana cabida, enriquecioendo esta lengua, para que los peruanos y especialmente los andinos volvamos a sentir el orgullo y la necesidad de su aprendizaje.
- La antigua Universidad San Antonio Abad se ha estancado y su calidad de centro cultural y académico no es más reconocido, ni siquiera dentro de las fronteras nacionales, a pesar de las nostálgicas reminiscencias de otros tiempos. Por tanto, un primer sueño que propongo es que esta Universidad sea recuperada en su condición de centro de desarrollo cultural, lo que implica, necesariamente, que se hagan cargo de ella personas profesionales competentes y con los necesarios y reales merecimientos académicos, que no pasan por el formalismo de los cartones hasta el hartazgo. No queremos doctores o magísteres, llenos de papeles, pero que no saben por lo menos hilvanar una idea por escrito (a pesar de lo cual hasta escribieron libros que quizá nadie leyó), queremos profesionales capaces de relanzar el ánimo de investigación, de estudio en su sentido mayor. Esa Universidad ya no debiera estar situada en medio de la ciudad, sería importante trasladar su ubicación, quizá hacia el Valle Sagrado o incluso hacia La Convención, lugar donde la ciudad universitaria sea eso, una ciudad o comunidad de estudiantes y maestros. En esa Universidad no pueden verse los servicios higiénicos sucios que espantan cualquier ánimo de higiene como los tiene hoy. Tampoco puede seguir siendo una extensión de la ciudad, debe ser el corazón y el cerebro de la ciudad, de nuestra cusqueñidad. Los nuevos aires debieran empezar a soplar desde ahí. Una Universidad en la que se promueva la investigación, empezando por cosas tan familiares como los logros prehispánicos en la agricultura, en la astronomía, en la medicina. ¿Seremos capaces de recuperar los conocimientos que permitieron desarrollar los andenes o el control vertical de pisos ecológicos? Si no somos capaces de empezar a promover la investigación universitaria en estos campos y así el desarrollo de un foco cultural, contentémonos, como hoy, entonces con los despliegues folklóricos de nuestra cusqueñidad.
- El Cusco no puede seguirse irguiendo (o postrando) ante el Perú limeñocentrista. La integración panandina es un eje que debiera trabajarse con seriedad y aun al margen de la capital de los reyes. Un segundo sueño que propongo: una interconexión ferroviaria (con trenes veloces por no excederme diciendo trenes de alta velocidad) entre el Cusco y la ciudad de La Paz en Bolivia, que permita que el sur andino del Perú y el nor occidente boliviano se integren de mejor manera y puedan desarrollarse los intercambios de manera más fluida. Sueño con que luego ese circuito ferroviario llegue hasta Quito en Ecuador. (Dicho sea de paso, en Brasil están convocando a dferentes empresa para que se desarrolle un mega proyecto de 12 mil millones de dólares: tren de alta velocidad para unir Sao Paulo y Río de Janeiro; aunque nuestra realidad es muchísimo más austera, persisto en el sueño de trenes veloces por lo menos).
- Sueño un Cusco con una arquitectura inteligente y moderna, pero propia, una ciudad hermosa no solo por su pasado, sino fundamentalmente por su presente y su futuro. Se necesitan arquitectos, entonces, que miren más allá de la piedra de los doce ángulos y que, de manera creativa, edifiquen una ciudad armoniosa con su contexto geográfico y cultural. Capaces, eso sí, de impulsar una creatividad sin límites.
- Un Cusco con medios de transporte modernos aunque ajustados a sus necesidades. Podría ser un pequeño Metro (o tren) que recorra el Cusco desde el corazón de la urbe hasta Urcos quizá, aun no lo sé, y con sistemas troncales de alimentación. Debieran desaparecer las combis espantosas y nuestras calles debieran ser, además de hermosas, funcionales.
miércoles, 23 de junio de 2010
Cuba entre dos fuegos

Regreso a La Habana: ¿se abre el diálogo?
Los intolerantes de dentro y de fuera no sirven a Cuba. El país necesita reconciliación nacional, libertad y reformas estructurales. Son decisiones que corresponde tomar a los cubanos sin interferencias externas
CARMELO MESA-LAGO
Después de 20 años sin poder ir a Cuba, visité La Habana (14-20 de junio) para participar en la X Semana Social Católica, invitado por el cardenal Jaime Ortega. Me otorgaron la visa de entrada, pero a la semana un funcionario del Consulado cubano en Washington me informó de que la habían revocado. "¿Puede darme las razones?", pregunté. Me contestó: "Vino de arriba". Tras una nueva gestión del cardenal y otros apoyos, me telefoneó el cónsul de Cuba para darme la noticia de que se había revocado la revocación.
Entre 1978 y 1990 viajé cuatro veces a Cuba, para participar en diálogos, seminarios y encuentros con economistas cubanos. Primero fue el "diálogo" entre el Gobierno cubano y la comunidad en el exterior, en gran medida un monólogo pero que resultó en la liberación de 3.600 presos políticos y el inicio de los viajes de exiliados cubanos a la isla, así como de sus familiares a Estados Unidos. En 2003 me invitaron para la primera conferencia internacional de seguridad social en La Habana; envié una ponencia, me incluyeron en el programa, tenía una entrevista concertada con técnicos cubanos para discutir un estudio mío sobre la reforma de las pensiones... y no me dieron la visa.
Este último viaje fue el más grato y con mayor anuencia. Unos 150 representantes de acción social en diócesis de toda la isla, académicos y funcionarios nacionales me trataron con afecto y respeto; charlé dos horas y media con el cardenal y también individualmente con cuatro obispos. Me reuní en el Centro de Estudios de la Economía Cubana (Universidad de La Habana) con nueve economistas; con los cuales había sostenido un intercambio académico por muchos años así como debates en España, EE UU, Canadá e Italia pero no en Cuba. Contrario a los cuatro viajes anteriores en que predominó la confrontación, en este prevaleció el consenso y el diálogo respetuoso a las ideas diversas.
El canciller del Vaticano Dominique Mamberti planteó que la ley no puede "sofocar la libertad religiosa y limitar o negar otros derechos fundamentales"; la Iglesia tiene "el deber inmediato de actuar a favor de un orden justo en la sociedad". El cardenal dio la bienvenida al "diálogo que acerca, que crea puentes". El jesuita Jorge Cela, destacó pasajes clave para Cuba de la Encíclica Caritas in Veritas: el amor frente a la confrontación para la reconciliación nacional; el derecho a la libre asociación; la importancia de la sociedad civil para el desarrollo de la democracia económica; el pluralismo de empresas para no dejar todo en manos del Estado; el diálogo y la participación de todos en los cambios necesarios.
Aurelio Alonso, subdirector de la revista Casa de las Américas, advirtió que el diálogo implica tolerancia y entendimiento, en vez de proselitismo e imposición. Fue partidario de eliminar los actos de repudio en las dos orillas, rechazó mirar a la comunidad de Miami con inmovilismo, reconoció que Cuba no ha contribuido en medida suficiente a generar un clima de diálogo y concluyó: "Nuestra capacidad para dar respuesta al diálogo dentro de la nación depende de que estemos en condiciones también de afrontar el diálogo con la emigración". Jorge Domínguez, vicerrector de Harvard, notó que la palabra "traición" se utiliza en Cuba y en el exilio contra aquel que discrepa, un recurso del que carece de argumentos y evidencia su temor a que si hay un debate, se demuestre su ignorancia. Con excepción de 1978, las reuniones con la emigración se han limitado a representantes de la última que coinciden de antemano con el Gobierno en una agenda fijada por este. Citó encuestas que muestran que el porcentaje de los exiliados en el sur de Florida que aprueban el diálogo ha crecido de 40% en 1991 a 65% en 2007, aumentando a 79% entre los que emigraron después de 1995.
En la sesión sobre reconciliación entre cubanos, Rafael Hernández, director de Temas, jugando el papel de abogado del diablo, presentó 17 preguntas. Aceptó la reconciliación de las personas y las familias. Consideró imposible la reconciliación entre ideologías diversas, pero afirmó que la reconciliación política es "premisa imprescindible para conseguir la estabilidad y el equilibrio social en Cuba". Arturo López-Levi, profesor adjunto de la Universidad de Denver, se centró en la idea de "Casa Cuba" propuesta por Carlos Manuel de Céspedes, y mantuvo dos principios fundamentales: la soberanía nacional y el acatamiento de todos los derechos humanos, incluyendo un Estado democrático y de bienestar, con gobierno de mayorías y respeto a las minorías. La reconciliación es un proceso basado "en la premisa de que un paso de distensión puede llevar a otro, creando impulsos y cambiando el ambiente social y político".
En el panel sobre economía y sociedad, los académicos cubanos Omar Everleny Pérez Villanueva y Pavel Vidal presentaron análisis francos y detallados de la magnitud de las crisis macroeconómica interna y externa, así como de la banca, con los cuales concordé. Yo analicé el envejecimiento de la población cubana (el más avanzado en la región después de Uruguay) y cómo agrava la insostenibilidad financiera de las pensiones a largo plazo, a pesar de que el poder adquisitivo de las mismas se ha reducido a la mitad desde 1989. Hubo consenso sobre la necesidad de implementar las reformas estructurales económico-sociales, acelerarlas y profundizarlas, para dinamizar un proceso que en los últimos tres años ha sido positivo pero lento y a cuentagotas, sin atacar los problemas fundamentales planteados por Raúl Castro desde 2007: la incapacidad de la agricultura para producir el 80% de los alimentos que se consumen, la dualidad monetaria, la insuficiencia de los salarios para cubrir las necesidades básicas, la necesidad de aumentar la producción y la productividad, así como revertir la caída en las exportaciones y en la producción azucarera.
Mi última visita en 1990 había precedido la terrible crisis que siguió al colapso del campo socialista. Después de 20 años no reconocí a mi amada ciudad. Paradójicamente, no sabía dónde me encontraba: ni en la parte de La Habana Vieja maravillosa y fielmente restaurada por Eusebio Leal, ni en la esquina de Galiano y San Rafael o las calles Reina y Monte, antes los centros comerciales más importantes y ahora en ruinas. Visité a los disidentes pacíficos Óscar Espinosa Chepe, economista independiente y uno de los 75 presos de la Primavera de 2003, y su esposa Miriam Leiva, escritora y una de las principales organizadoras originales de las Damas de Blanco. Viven en un apartamento minúsculo y pobre, ciertamente no el lugar de personas acusadas de recibir dinero del extranjero.
Antes de mi visita habían ocurrido eventos cruciales: la muerte de Orlando Zapata, el acoso a las Damas de Blanco, la huelga de hambre de Guillermo Fariñas, y el encuentro del cardenal con el presidente. De esta reunión surgió la autorización del Gobierno a que desfilen las Damas de Blanco sin actos de repudio, la liberación de un preso político que está parapléjico, y el traslado de otros 12 presos enfermos a cárceles menos severas y más cercanas a sus familiares. Estas acciones deberían ser apoyadas, dentro y fuera de Cuba, con la esperanza de que conduzcan a la liberación de todos los presos de conciencia. Pero un sector minoritario extremista del exilio en Miami se opone a ello y acusa de colaboracionistas a los cubano-norteamericanos que participamos en la Semana Social Católica. También dentro de Cuba hay un sector (tildado por una alta autoridad cubana de dinosaurios y jacobinos) que obstaculiza la apertura y las reformas económicas. Ambos grupos intolerantes antagónicos se unen en la defensa de sus intereses respectivos y en la confrontación, retroalimentándose entre sí.
¿Cuál es la alternativa que después de 51 años ofrecen estos dos sectores extremos? Es inhumano que exiliados que tienen una vida acomodada, sin sufrir las enormes carencias que afronta el pueblo cubano, fomenten el hambre para provocar un estallido o la guerra civil. Es igualmente reprobable que funcionarios y burócratas cubanos, a los que tampoco les faltan bienes y servicios negados a su pueblo, se opongan a las reformas urgentes y necesarias para sacar la nación de la crisis.
Hay que romper el círculo vicioso con un diálogo que lleve a la reconciliación nacional, la libertad de los presos de conciencia y las reformas estructurales esenciales, decisiones que corresponden a los cubanos sin interferencia externa. Esta alternativa humana no solo ayudaría a Cuba, sino también a la eliminación del embargo de Estados Unidos y a un cambio de actitud de la Unión Europea. Para ello, estoy dispuesto a regresar a mi patria de origen, contra la oposición de los grupos intolerantes dentro y fuera de Cuba.
Carmelo Mesa-Lago es catedrático de Economía y Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Pittsburgh (EE UU).