viernes, 16 de julio de 2010

Calle 13, al ataque nuevamente

Letras directas de esta canción aunque no completas. Buscaré para colgarlas. Infiltrarse en el sistema para reventarlo desde dentro.

sábado, 3 de julio de 2010

Primer sueño

Desde niño soñé con ser Presidente de nuestro país y, luego, imaginaba llegar a ser Alcalde del Cusco. Entonces, el sueño era fácil y me imaginaba logrando el desarrollo del Perú, primero, y luego generalizándolo hacia toda Sudamérica, para finalmente devolverle el esplendor al Cusco. Hoy, a mis casi cuarenta años, ya no me es tan sencillo soñar, pues me da la sensación del delirio y, probablemente, asumo con cierto realismo mis limitaciones y mis verdaderas posibilidades (la política es un campo privilegiado de concesiones recíprocas y, sobre todo, de habilidades sociales de las que carezco por completo).


Sin embargo, no quiero que los sueños que aun me acompañan y que seguramente no demorarán en abandonarme se pierdan en la nada. Los quiero compartir con usted, enigmático receptor de estas líneas. Hoy mis sueños quiero circunscribirlos al Cusco, la tierra de la que vengo y en la que, al final de mis días, espero que se esparzan mis cenizas.
  1. El Cusco fue centro de una importante cultura de la antigüedad y, de alguna manera, marcó un hito central en un desarrollo independiente de las denominadas "grandes culturas". Fue centro de esa cultura y de una cosmovisión de la que no hemos conocido mucho y, más bien, vamos perdiendo paulatinamente.

  2. Otro hito importante fue el de la revolución tupacamarista del siglo XVIII y sus repercusiones en el mundo andino, aunque también las consecuencias de la represión realista como consecuencia de la misma generó grandes pérdidas respecto a los pueblos andinos.

  3. Durante la primera parte del siglo XX, el Cusco y los cusqueños lograron volver la mirada sobre ellos mismo, sin perder de vista el acontecer mundial, intentando recuperar la esencia de la cusqueñidad y las posibilidades de un desarrollo regional.

  4. Desde los últimos 25 años del siglo XXI, el turismo y la actividad económica en torno al turismo, se han convertido en la columna vertebral de la ciudad, aunque paradójicamente esto ha generado una banalización de la realidad de la ciudad, en la que no existen actividades culturales, más allá de alguna excepciones y los permanentes espectáculos folklóricos.

  5. El kechua se viene perdiendo y cada vez son menos jóvenes urbanos los que hablan o, por lo menos, entienden este idioma. La Academia de la Lengua Quechua no tiene una dinámica importante que aporte no solo en el mantenimiento de esta lengua, sino respecto de su desarrollo para estar acorde con este tiempo. Sueño con que se desarrolle una Academia Plural en la que los diferentes dialectos del kechua tengana cabida, enriquecioendo esta lengua, para que los peruanos y especialmente los andinos volvamos a sentir el orgullo y la necesidad de su aprendizaje.

  6. La antigua Universidad San Antonio Abad se ha estancado y su calidad de centro cultural y académico no es más reconocido, ni siquiera dentro de las fronteras nacionales, a pesar de las nostálgicas reminiscencias de otros tiempos. Por tanto, un primer sueño que propongo es que esta Universidad sea recuperada en su condición de centro de desarrollo cultural, lo que implica, necesariamente, que se hagan cargo de ella personas profesionales competentes y con los necesarios y reales merecimientos académicos, que no pasan por el formalismo de los cartones hasta el hartazgo. No queremos doctores o magísteres, llenos de papeles, pero que no saben por lo menos hilvanar una idea por escrito (a pesar de lo cual hasta escribieron libros que quizá nadie leyó), queremos profesionales capaces de relanzar el ánimo de investigación, de estudio en su sentido mayor. Esa Universidad ya no debiera estar situada en medio de la ciudad, sería importante trasladar su ubicación, quizá hacia el Valle Sagrado o incluso hacia La Convención, lugar donde la ciudad universitaria sea eso, una ciudad o comunidad de estudiantes y maestros. En esa Universidad no pueden verse los servicios higiénicos sucios que espantan cualquier ánimo de higiene como los tiene hoy. Tampoco puede seguir siendo una extensión de la ciudad, debe ser el corazón y el cerebro de la ciudad, de nuestra cusqueñidad. Los nuevos aires debieran empezar a soplar desde ahí. Una Universidad en la que se promueva la investigación, empezando por cosas tan familiares como los logros prehispánicos en la agricultura, en la astronomía, en la medicina. ¿Seremos capaces de recuperar los conocimientos que permitieron desarrollar los andenes o el control vertical de pisos ecológicos? Si no somos capaces de empezar a promover la investigación universitaria en estos campos y así el desarrollo de un foco cultural, contentémonos, como hoy, entonces con los despliegues folklóricos de nuestra cusqueñidad.

  7. El Cusco no puede seguirse irguiendo (o postrando) ante el Perú limeñocentrista. La integración panandina es un eje que debiera trabajarse con seriedad y aun al margen de la capital de los reyes. Un segundo sueño que propongo: una interconexión ferroviaria (con trenes veloces por no excederme diciendo trenes de alta velocidad) entre el Cusco y la ciudad de La Paz en Bolivia, que permita que el sur andino del Perú y el nor occidente boliviano se integren de mejor manera y puedan desarrollarse los intercambios de manera más fluida. Sueño con que luego ese circuito ferroviario llegue hasta Quito en Ecuador. (Dicho sea de paso, en Brasil están convocando a dferentes empresa para que se desarrolle un mega proyecto de 12 mil millones de dólares: tren de alta velocidad para unir Sao Paulo y Río de Janeiro; aunque nuestra realidad es muchísimo más austera, persisto en el sueño de trenes veloces por lo menos).

  8. Sueño un Cusco con una arquitectura inteligente y moderna, pero propia, una ciudad hermosa no solo por su pasado, sino fundamentalmente por su presente y su futuro. Se necesitan arquitectos, entonces, que miren más allá de la piedra de los doce ángulos y que, de manera creativa, edifiquen una ciudad armoniosa con su contexto geográfico y cultural. Capaces, eso sí, de impulsar una creatividad sin límites.

  9. Un Cusco con medios de transporte modernos aunque ajustados a sus necesidades. Podría ser un pequeño Metro (o tren) que recorra el Cusco desde el corazón de la urbe hasta Urcos quizá, aun no lo sé, y con sistemas troncales de alimentación. Debieran desaparecer las combis espantosas y nuestras calles debieran ser, además de hermosas, funcionales.
Continuará................